Los sobrevivientes el encuentro, Paúl y el nuevo villano
- Ana

- 4 dic 2019
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 17 dic 2019
Un año más tarde aún recuerdo como me encontraba después de esa desilusión amorosa (pérdida, vacía y sin un objetivo en la Vida) tuve la necesidad de acudir a una psicóloga que en su momento sentí que no me ayudó, fue ahí donde una prima me invitó a un retiro espiritual, recuerdo que pensé que “¿Qué puedo perder?” 4 días fueron suficientes para encontrarme de nuevo para volver a sonreír de verdad, nunca me había sentido llena y completa de esa forma, me entregue por completo y Dios tomó mi vida, es aquí donde mi vida empezó a tener un nuevo sentido, recuerdo que durante esta etapa tuve un novio (Paúl) quien me enseñó a ser feliz a relajarme ante cualquier problema y sobre todo a ser yo misma, aunque Él no creía en Dios, recuerdo como me apoyó, mencionó querer ir al retiro pero nunca quise obligarlo a nada, por cuestiones del destino o como yo lo creo por “Dioscidencias” Paúl ganó una beca y viajó al exterior solo cuatro meses estuvimos juntos de los cuales uno separados hasta que decidió tomar su camino y yo el mío, siendo sincera su partida no me afectó porque ahora lo entiendo, Paúl nunca interfirió en mi relación con Dios, vio que me sentía bien y para Él eso era lo importante (Que manera de demostrar amor)
Mi vida siguió (esta vez no estaré de acuerdo con el gran maestro Joaquín Sabina) porque esta vez mi vida si tenía sentido, un año después recuerdo sentir que mi corazón estaba listo para amar a alguien pero sin duda el miedo me invadía, tenía tanto miedo de perder la estabilidad que había ganado, estaba por terminar la Universidad y lo que menos quería era “complicarme” la vida, viajé a USA ese último verano y al regresar no deje de pedir a Dios por un buen hombre en mi vida, recuerdo estar una tarde frente a Jesús y decirle que mi búsqueda de un buen chico era necesaria de lo contrario no quería nada más y me contestó: "Tendrás a alguien que te hará aprender y al que le enseñarás muchas cosas" no era mi decisión era la de Dios.
Cumplí mis 23 años, un título en la mano me rodeaba lo pensé de nuevo y me repetía "Soy una mujer lista para enfrentar una vida adulta" estaba lista o al menos eso era lo que pensaba sin embargo el nuevo villano NO! ....cuando me volví a enamorar no lo vi venir solo lo sentí y sé que ese fue mi error.
Fue suficiente verlo, una sonrisa "sencilla" lo envolvía no sabía que aquello me traería demasiados problemas fue una tarde en mi Universidad saludó con mi mejor amiga de la U (de aquella época) y simplemente sucedió ahora acotando al maestro "Le dio por reír de pronto me vi como un perro de nadie ladrando a las puertas del cielo"
continuará...






Comentarios