El Mensaje
- Ana
- 2 feb 2020
- 2 Min. de lectura
Un mensaje con su amigo fue suficiente para darme cuenta que en el viaje que había hecho hace dos semanas con SUS PADRES a la playa quiso engañarme con la amiga de su hermana (María) pero no sucedió por falta de “tiempo” y "espacio" como decían los mensajes.
En este punto de la historia quiero que sepas que juzgarme no servirá de nada mi historia la comparto porque se que a veces no podemos por el amor que les tenemos a las personas, salir o continuar y más si hay un sentimiento fuerte que nos envuelve tan profundamente que cuesta respirar y hasta pensar.
Al regresar por su celular, le pedí que saliéramos afuera yo estaba molesta y transformada después de todo que podía pensar, hice el reclamo respectivo y le pedí que se alejara de mi, de mi vida! (Nunca me dejó en paz hasta que de verdad tuvo alguien más en su vida) hablo conmigo me buscó varios días en los cuáles me convenció por sus primeras lágrimas derramadas, nunca lo había visto así, tan vulnerable y verlo llorar me partía el corazón en mil pedazos (cuando entenderemos que unas lágrimas no significan nada cuando las acciones lo dicen todo), me contó que su mamá sabia lo que sucedió sobre esta primera pelea a lo que ella le contestó: “Que no debió hacer eso y menos con una chica como yo que debía repararlo"
Dos años transcurrieron y las excusas solo iban empeorando hasta que llegó ese día el día en que decidió por El y no por mi (como siempre lo hizo)
Era el cumpleaños de mi mejor amiga del
Colegio estábamos invitados, llegue de mi trabajo a arreglarme y el supo decirme que estaba haciendo "un trabajo" y que no tardaría en llegar, dos horas más tarde ahí estabas en la puerta de mi departamento, yo recibiéndote y tu sosteniendo una botella a media acabar feliz con una sonrisa que solo el alcohol sabe dibujar muy bien (vacía y con engaños...)

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